Esta pregunta no fue hecha por un saduceo o un filosofo. Es una pregunta que Cristo mismo lanza a sus oyentes. Además, no es insignificant el moment cuando la hace: El se encuentra a una semana y días antes de ser crucificado por los pecados nuestros. Su pensamiento de fondo: ¿hay fe real entre los hombres?
¿Qué diría usted en respuesta a Cristo? Por mi parte, no quiero responder demasiado rapido, pues creo que mi fe ha sido probada, pero a veces es hallada flaca y debilucha.
Un ejemplo de ello ha sido durante los últimos dos años de vida en nuestra Iglesia Bautista Vida Nueva donde hemos pasado por una larga prueba de nuestra fe. La prueba giraba en torno a la construcción de nuestro templo nuevo. Muchos nos preguntabamos, ¿por qué demora tanto la respuesta para completarlo y poder tender uso del templo? Aveces me preguntaba si era yo, el que estaba haciendo demorar la respuesta. Nos preguntamos como líderes por qué se alargaba tanto la respuesta. No sabíamos por qué, y tampoco podiamos dar una clara y cierta contestación a los mismos hermanos de la congregación.
¿Sabes qué? Creo haber encontrado la respuesta, recientmente hace un mes en mis estudios y meditación de la Palabra de Dios. Se encuentra en Lucas 18:1-8. Copio el texto entero aquí de la Biblia para que lo leas.
«Y les refería Jesús una parábola para enseñarles que ellos debían orar en todo tiempo, y no desfallecer, 2 diciendo: Había en cierta ciudad un juez que ni temía a Dios ni respetaba a hombre alguno. 3 Y había en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él constantemente, diciendo: «Hazme justicia de mi adversario.» 4 Por algún tiempo él no quiso, pero después dijo para sí: «Aunque ni temo a Dios, ni respeto a hombre alguno, 5 sin embargo, porque esta viuda me molesta, le haré justicia; no sea que por venir continuamente me agote la paciencia.» 6 Y el Señor dijo: Escuchad lo que dijo* el juez injusto. 7 ¿Y no hará Dios justicia a sus escogidos, que claman a El día y noche? ¿Se tardará mucho en responderles? 8 Os digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará fe en la tierra?» Lucas 18:1-8, La Biblia de las Américas.
Esta parábola es una historia con un mensaje poderoso de fondo. En muy pocas palabras es: ora hasta que llega la respuesta.» Tan sencillo como esto. Cristo usa un ejemplo de una figura llamada el juez para representar a Dios. En realidad es un «anti-dios» porque el Dios verdadero no tiene el carácter de este juez.
Además, la viuda tiene una petición totalmente legítima. Está pidiendo protección legal de sus agresores. La mujer, aparte de ser viuda, era indefensa y vulnerable. La petición debia ser respondida. Ella simboliza, en la parábola, al creyente, con una petición razonable, normal, correcta y entendible. Así es muchas veces en nuestra vida. Tu y yo, nuestra Iglesia, y muchas iglesias o grupos de los hijos de Dios, entregamos nuestra peticiones legítimas a Dios. Pero, aun así, demora la respuesta en llegar.
¿Por qué es esto? La respuesta está en lo que Cristo dice cuando por fin, el juez le otorga a la vuida su respuesta. En las palabras del agobiado juez, «…no sea que por venir continuamente me agote la paciencia.» La frase que Cristo emplea es clásica. Significa, literalmente, » no sea que por venir continuamente me deja una marca debajo del ojo!» La viuda era tan persistente en sus oraciones, su persistencia, que le iba a dejar el ojo morado al juez!! No por un golpe de su puño, sino por su PERSEVERANCIA Y SU FE!
Esta verdad es la que Cristo quiere enseñar a Sus seguidores. La lección: La oración requiere que el que ora no desfallezca (18:1), que no se rinda, que no tire la toalla. ¡Esto es una muestra de la fe perseverante! Esta es la fe que Cristo busca en nosotros.
Por tanto, la verdad de si acaso El hallará una fe real cuando El regrese, estába intimamente ligado con nuestra práctica de la oración. Y porque la gran mayoría de nosotros tenemos una fe pálida y floja, Dios nos permite practicar la perseverancia en nuestras peticiones, al hacernos pasar por largas esperas para la respuesta.

Esto fue, para mi, lo que Dios nos quiso enseñar en Vida Nueva. Es lo que Dios me quiso enseñar a mí y a mi familia. En particular, es lo que Dios nos estaba enseñando durante los 4 años de la construcción y la tediosa espera que pasamos.
Ahora, desde el 4 de septiembre del 2012, tenemos la autorización municipal para ocupar nuestro templo nuevo. ¡GLORIA A DIOS POR ELLO! Y también, tenemos una valiosa lección en la necesidad de la perseverancia en la oración, pues, así nuestra Iglesia tendrá fe cuando Cristo regrese. Seremos una iglesia de una fe fuerte, saludable y vigorosa. Esto es una lección más valiosa que la misma respuesta a la oración de poder usar nuestro nuevo templo.
Así que, ambas respuestas: tener aceso oficial del templo, y tener fe que saber perdurar, son grandes y gloriosas respuestas a nuestra petición. ¿Qué tal amigo lector: hallará fe el Señor Jesucristo en TU VIDA cuando El regrese?
Esperando con Fe la Venida del Señor,
David L. Rogers, M.A.Min.
Pastor Misionero
IBVN
Ya regreso, y no Ayo fe, lo que encontró fue religión y doctrinas de hombres corruptos de entendimiento, eso lo confirma romanos 16:25 JESUCRISTO hombre predicaria el evangelio que escribió el gran apóstol Pablo, el evangelio de la incircuncision
Perdona Estimado Walter Huanmani, por no responder antes. No lo había visto su respeusta.
Bueno, con un espíritu inquisitivo, le pregunto, ¿por qué piensa Ud. que Jesucristo ya regresó? Y si ya regresó, ¿Por qué no llevó consigo a su Iglesia amada y redimida? Si Cristo ya regresó, ¿qué viene por delante? Y donde nos instruye en la Biblia qué dedemos hacer los cristianos?
Por mi parte, creo que la Palabra de Dios claramente dice que en los postreros tiempos vendrán burladores, engañadores y personas que creen en mentiras y doctrinas falsas (2 Timoteo 4:3-5). Cuando esto sucede nosotros los que hemos creído en el maravillos evangelio de Dios que Cristo nos trajo, podremos estar seguros de una cosa: el mundo sin Cristo no nos tolerará más. Y seremos rechazados por el mundo, no aprobados y aceptados.
Le animo, Walter, a leer estos textos con atención y con un corazón enseñable:
1. 1a Timoteo 3:1-9
2. 2a Tesolonicenses 2:1-17
3. 2a Corintios 10:1-6
No ha vuelto aun el Señor Jesucristo, y esto lo sabemos porque Su preciosa Iglesia sigue acá en la tierra. Y esa iglesia la componen todos los que hemos creído por fe en la palabra de Cristo y en su Evangelio. Un día, sí, regresará. Pero no ha vuelto todavía. Por ello, todavía hay tiempo para creer en la Palabra de Dios, y para obedecer su Evangelio. Por ello, tengo la seguiridad que un día Cristo volverá, me llevará con EL. Cristo lo prometió, y yo le creo a Cristo.
Saludos cordiales,
David Rogers, Magister en Artes
Pastor Misionero
Hermano Gracias muy bueno su mensaje, yo soy nueva creyente y me gusta estudiar las parabolas
Gracias Varon soy nueva creyente y me gusta estudiar la parabolas
Yo no entendi muy bien quien es el adversario y quien era realmente el juez injusto
Estimada Mary,
Gracias por su consulta. Intentaré responderle brevemente a su pregunta. Primero, ¿Quién es «el adversario»? En la parábola de la viuda, no tiene un adversario nombrado ella. Pero, está pidiendo ser protegida de él. Por lo tanto, Cristo no le identifica. Puede haber sido un tipo sin escrúpulos que quería obligarle a pagar un impuesto injusto. Puede haber sido un vecino que le presionaba por algún motivo. Pero, en la ilustración que Cristo da a través de la palabra, no importa realmente cuál tipo de adversidad o cuál tipo de presión ella estaba recibiendo. El punto central del ejemplo es la reacion y la actitud de la viuda frente al problema. Es así que vemos que el creyente recibe ataques de distintos adversarios también. El Señor Jesús no está enseñando a perseverar en oración, y el punto es que seamos constantes en ella, a pesar de cual quier tipo de advesidad.
Segundo, Usted me preguntó, «¿Quién es el juez?» En la palabra es evidente que el juez humano realmente no actua como el Señor todo poderoso, Dios mismo. PERO, la ilustración o la parábola, requiere que uno mismo reconozca que Dios es tan distinto que los jueces humanos. Que nuestro Dios es activo, no indiferente, y que Dios mismo es capaz de solucionar los problemas de Sus hijos. Es así que el juez, en la parábola, viene a ser un ejemplo «negativo» del verdadero carácter de Dios. En otras palabras, el juez es un modelo OPUESTO a como es Dios en verdad.
Nuestro Dios es compasivo, y sí, le preocupa el bien estar del hombre, por sobre todo lo de sus hijos. Por lo tanto, el juez es Dios mismo, pero es una «caricatura» de El. Por lo negativo, se realza lo positivo del Señor.
Espero que le aclare sus dudad, Mary. Que Dios le siga enseñando y guidando a través de las Escrituras.
Atento a sus Comentarios,
David L. Rogers
Pastor-Misionero
Es un bello mensaje de reflexion espiritual para un cristianismo moderno . Antonio